FANTASMA BIPOLAR
Te siento cerca, y te regalo el crédito
de acompañarme aunque así no sea.
Busco motivos para quererte, no
pudiendo aceptar que saliste de mi vida.
Tu voz comienza a ser molesta en
mis oídos, no puedo hacerte decir las cosas que quiero escuchar. No puedo
abrazarte si no elegís estar a mi lado.
Y el tiempo me enseño a acostumbrarme
a eso.
Pero como si fuera poco lo que me
pasa, reincidís en mi mente como una llovizna incesante.
Cuando la vida golpea, cuando
necesito ojos para cobijarme, vuelvo a necesitar tus ojos. Tus ojos hoy
heridos, tus ojos vacíos que me tiñen de colores que ya no tengo. Tus ojos que
me observan escudados, que me miran desde lejos.
Pero tendrás que saber que cuando
escuches el suspirar de alguien que añora no tendrás opción más que encontrarme.
Cuando observes el mar, el campo,
o las montañas. Cuando algo te recuerde el amor y la pena, voy a estar ahí. Y no
tendrás elección. Tendrás que desplegar en el mundo la contención que no podes
darme.
Tendrás que encontrarme en mis
cosas regadas por el mundo.
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